Como ya sabemos que el cerebro mamífero de cada niño que nace está en blanco y se va grabando por imitación y por introyección, haciendo una fusión del cerebro mamífero de los progenitores, para poder desarrollarse como un ser humano, ahora podemos empezar a entender que todos percibimos y afrontamos lo que sucede como necesitamos percibirlo y afrontarlo procedente del cerebro mamífero. Es lo que se ha denominado transmisión cultural, los valores, las creencias, las certezas, los deberías, el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto, etc.
Todo puede ser perfecto cuando el cerebro se abre a la posibilidad de que todo puede llegar a ser percibido como perfecto, pasando del pensamiento convergente al pensamiento divergente.
Con la TERAPIA EDUCATIVA-EXPERIENCIAL DE ESCUCHA en Atención Individualizada, las personas mientras van hablando y con mi acompañamiento, van descubriendo que efectivamente todo lo que me van contando lo han percibido de una manera transmitida y cuando van tomando conciencia de esto, se van abriendo a la posibilidad de desplegar el infinito potencial creativo para transformar esa percepción transmitida que activó su cerebro reptiliano, entrando en estado de secuestro emocional, en una nueva única y original, que les devuelva la paz interior y les permita descubrir respuestas eficaces y satisfactorias. Todo esto es un proceso. No es una meta, es un horizonte esperanzador con infinitas posibilidades desde el pensamiento divergente.
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