jueves, 17 de diciembre de 2020

Los niños tardan en adquirir la capacidad de conservar.


Es muy importante que las personas que tiene la oportunidad de estar  con niños pequeños entiendan que los niños nacen con la capacidad de destruir todo lo que cogen para construir los primeros aprendizajes a través de sus experiencias.

Cuando entienden esto ya sólo dejaran a su alcance juguetes y cosas que puedan romper mientras experimentan y nunca le recriminaran por romper, sino que le dirán “no pasa nada “,   para no bloquear su impulso natural a experimentar destruyendo, rompiendo, tirando, etc..

La propia madurez del niño imitando el modelo de sus padres de conservar lo que está en buen estado y retirando lo que se va rompiendo, le irá llevando a desarrollar, poco a poco y a su ritmo,  la capacidad de conservar.

Mientras más  les faciliten que experimenten rompiendo, tirando, destruyendo, etc.  más fácil será que de forma espontánea desarrollen la capacidad de conservar en buen estado sus cosas, porque habrán aprendido a través de sus propias experiencias a cuidar lo que les gusta, para poder tenerlas en buen estado.


Hablando con Manuela podrán ir entendiendo lo importante que es para los niños pequeños que puedan romper, tirar, desordenar etc.  en su presencia, y facilitarán que tengan estas experiencias para que  puedan crear aprendizajes  a través de sus experiencias. Todo esto es un proceso transformador que se inicia hablando de cómo perciben a los niños cuando rompen, tiran o desordenan lo que se van encontrando, desplegando la creatividad puedan ir transformando dicha percepción en otra que les permita disfrutar con los niños, observando y descubriendo su originalidad.



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