Es muy importante entender
que no podemos transformar al otro por mucho que lo intentemos y que sólo
podemos transformar las percepciones de lo que va sucediendo dentro y fuera de
nosotros, para normalizar las situaciones o los comportamientos nuestros o de
los otros que no nos gustan, porque los percibimos cómo malos para nosotros.
El cerebro humano tiene creatividad infinita para normalizarlo todo, cuando es capaz de descubrir qué le aporta lo que no le gusta de lo que le va presentando la vida, de los otros o de él mismo.
Hablando con Manuela y con su acompañamiento podrán ir tomando
conciencia de cuántas situaciones de su pasado no han normalizado porque no han
descubierto qué le aportaron dichas situaciones no deseadas y que están
condicionando su presente su futuro porque no han transformado las percepciones
transmitidas en otras que permitan la normalización de lo que está viviendo y
de lo que puede vivir.
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