Si entendemos que
la frustración nos indica que hay grabada en nuestro cerebro reptiliano una
necesidad que no depende de nosotros la cobertura, la percibiremos como una
oportunidad para transformarla en posibilidad y no tendremos miedo a sentirla
porque ya sabemos para qué sirve.
Cada vez que transformamos una necesidad, que no depende de nosotros la cobertura, en posibilidad, nos vamos humanizando y sintiéndonos más libres, flexibles y fuertes que nos lleva a confiar más en la vida y en los propios potenciales.
La terapia educativa-experiencial de escucha te facilita que
mientras vas conversando con Manuela y con su acompañamiento vayas entendiendo que
cada vez que entras en estado de secuestro emocional, por frustración o por
miedo a la frustración, tienes la oportunidad de desplegar la creatividad
y librarte de una necesidad que no
depende de ti la cobertura, transformándola en posibilidad, recuperando así de
forma espontánea el estado de bienestar
que pierdes cada vez que entras en ese
estado. Y así, poco a poco empezaras a sentir la gratitud a la vida o a las
personas que te facilitan que entres en ese estado para que pueda tener lugar
todo ese proceso creativo y transformador que te irá humanizando, haciéndote
cada día mejor persona.
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