Los niños desde que empiezan a hablar hacen preguntas continuamente, porque necesitan entender lo que no entienden.
Mientras van creciendo, como no encuentran muchas veces respuestas que les llevan a entender lo que no entienden, empiezan a desplegar su infinito potencial creativo, de forma espontánea, para descubrir respuestas creativas producto de sus propias experiencias.
Esto explica que a veces los niños y jóvenes tengan respuestas inteligentes a preguntas que los adultos sólo saben repetir las respuestas ofrecidas por el modelo.
Por esto cuando los padres descubren lo que pueden aprender mientras acompañan a sus hijos en sus experiencias, transforman la necesidad de educar transmitida basada en el adiestramiento, en las infinitas posibilidades de acompañar a su hijo para poder aprender juntos creando un vínculo sólido y seguro.
Con la TERAPIA EDUCATIVA-EXPERIENCIAL DE ESCUCHA en Atención Individualizada, las personas mientras van hablando y con mi acompañamiento, van descubriendo que ejerciendo su responsabilidad como padres desde la autoridad, no descubren nada nuevo y sienten mucha frustración que les lleva a sentirse distantes de sus hijos convirtiéndose en sus enemigos, jueces, policías, detectives, fiscales y empiezan a generar, de forma espontánea, la necesidad de sentirse abogados defensores de sus hijos, acompañándolos en sus experiencias favoreciendo así el desarrollo de los instintos de padres e hijos que les guíen siempre a favor de sus intereses. Todo esto es un proceso.
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