Cuando conversamos para
conocer la originalidad del otro, no para convencer, ni para corregir,
entendiendo que cada uno tiene su verdad, aprendemos de forma espontánea a
escuchar para descubrirla y así poder entender tanto los comportamientos que me
resultan difíciles de entender de los otros y de mi misma.
Cuando escuchamos
para poder entender los pensamientos, los sentimientos y los comportamientos
del que es diferente, descubrimos su
percepción y nos facilita a su vez poder descubrir la nuestra, que es la única
que podemos transformar, desplegando la creatividad.
La terapia educativa-experiencial de escucha te facilita
que mientras vas conversando con Manuela vayas desarrollando tu capacidad de
escuchar para descubrir que lo que ella te va mostrando del funcionamiento del
cerebro, lo puedes ir comprobando en tu
experiencia de vida, e irás construyendo
nuevos aprendizajes, de forma espontánea. Conversar es
un proceso transformador continuo con un horizonte esperanzador, para poder escucharnos
a nosotros mismos.
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