Me gusta seguir
construyendo aprendizajes a través de las experiencias de mi vida y
generalmente lo hago escuchando y hablando, por eso me encanta conversar y
sorprenderme con mis palabras. En no pocas ocasiones me escucho diciendo algo
que no he dicho nunca y que acabo de descubrir mientras hablo. Todo está dentro
de mí, lo se, pero hasta que no sale en forma de palabras por mi boca no sabía
que estaba y me sorprendo y me emociono y mis ojos se rayan.
No me gusta que traten de hacerme ver blanco lo que yo veo claramente negro, porque me parece tan enriquecedor que yo pueda ver algo negro claramente y que otro pueda ver lo mismo con un blanco intenso que casi le ciega los ojos. Entre una mirada y otra existen infinitas miradas que se van acercando al blanco o distanciando del negro. Esta es nuestra originalidad, la mirada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario